liberación túnel carpiano: cirugía y postoperatorio

Liberación del túnel carpiano: cirugía y postoperatorio

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Con el estilo de vida que llevamos y las largas jornadas que pasamos en la oficina, muy probablemente conozcas a alguien que haya tenido el síndrome del túnel carpiano. Las posturas forzadas que adoptamos y los movimientos repetitivos que realizamos a lo largo de nuestra jornada laboral, como teclear en el ordenador, son una de las principales causas de este pellizco tan molesto. Descubre en qué consiste la cirugía de liberación del túnel carpiano y cómo es su proceso de recuperación de la mano del mejor equipo de neurocirugía.

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Qué es el síndrome del túnel carpiano

El túnel carpiano es un canal que se sitúa en la parte anterior de la muñeca, es decir, la cara flexora. Se encuentra entre los huesos de la muñeca y el ligamento anular del carpo, uno de los que une los ocho huesos que componen esta parte del esqueleto. Por el túnel del carpo pasan los tendones flexores de los dedos y el nervio mediano, el nervio que permite la sensibilidad y el movimiento a partes de la mano.

Síntomas del síndrome del túnel carpiano

  • Torpeza en la mano
  • Dificultad a la hora de agarrar objetos
  • Sensación de acorchamiento y calambres
  • Hormigueo en el pulgar y en los dos o tres días siguientes
  • Entumecimiento de la palma de la mano
  • Dolor en la mano o en la muñeca que se extiende hasta al codo

Es común que estos síntomas aparezcan durante la noche o cuando adquirimos determinadas posturas. Si esta enfermedad no se trata a tiempo, aparecerá debilidad en la mano y pueden llegar a atrofiarse algunos músculos de la mano.

Causas del síndrome del túnel carpiano

En el síndrome del túnel carpiano la lesión del nervio se debe a un aumento de la presión dentro del canal, bien sea por causas extrínsecas o intrínsecas. Este aumento de presión hace que el espacio del túnel se vea comprometido, por lo que se inflaman las vainas tendinosas (la envoltura) de los tendones flexores y disminuye el riego sanguíneo del nervio mediano.

Entre las diferentes causas traumáticas, podemos destacar:

  • Fracturas de muñeca: pueden llegar a deformar los huesos pequeños de la muñeca y producir hematomas.
  • Enfermedades inflamatorias de los tendones flexores de los dedos: artritis, gota, gangliones en la muñeca…
  • Enfermedades crónicas: la diabetes, por ejemplo, aumenta el riesgo de lesión en nervios
  • Causas degenerativas, como la artrosis de los huesos del carpo

Factores de riesgo

  • La edad: es común que se de en personas entre los 40 y los 60 años
  • El género: las mujeres son diagnosticadas de esta patología con más frecuencia que los hombres
  • Trabajo: la mayoría de los casos se relacionan con trabajos que incluyen movimientos repetitivos de dedos y muñecas, posturas forzadas, apoyos prolongados sobre el talón de la mano, presión, pinza manual, utilización frecuente de herramientas que vibran…
  • Obesidad
  • Retención de líquidos
  • Cambios hormonales: es común que este síndrome se de durante el embarazo, la lactancia, la menopausia o en enfermedades como el hipotiroidismo.
  • Consumo de determinados medicamentos como la cortisona o los anticonceptivos.

Tratamiento del síndrome del túnel carpiano

Cuando el nervio mediano se presiona, se produce lo que conocemos como el síndrome del túnel carpiano. Los casos leves pueden llegar a evolucionar de forma favorable con un tratamiento relativamente sencillo: inmovilización de la muñeca o inyección de corticoides. Pero, en casos más avanzados, la solución requiere pasar por el quirófano para poder liberar el nervio mediano, que ha quedado atrapado en el túnel del carpo.

Terapia no quirúrgica:

  • Inmovilización de la muñeca

Gracias a una férula, se mantiene la muñeca inmóvil mientras el paciente duerme para evitar los síntomas nocturnos, como el cosquilleo o el entumecimiento. Aunque sólo se coloque la férula durante las horas de sueño, también puede ayudar a prevenir los síntomas a lo largo del día. Esta solución se suele recomendar a pacientes embarazadas, evitando así que deban ingerir medicamentos.

  • Antiinflamatorios no esteroides

Los antiinflamatorios como el ibuprofeno pueden ayudar a aliviar el dolor a corto plazo, pero no existen evidencias de que mejoren el síndrome del túnel carpiano.

  • Corticoides

En ocasiones, también se puede inyectar corticoides en el túnel carpiano para aliviar el dolor. Estos medicamentos favorecen a diminuir la inflamación y la hinchazón, por lo que liberan la presión del nervio mediano. Por esto se recomienda inyectarlos y no consumirlos por vía oral, para que no pierdan eficacia.

Terapia quirúrgica:

Cuando los síntomas del síndrome del túnel carpiano son graves, muy avanzados o el paciente no está respondiendo a tratamientos previos, es recomendable recurrir a la cirugía de liberación. El objetivo de esta operación es aliviar la presión del canal cortando el ligamento que presiona el nervio mediano. Porque, además de la limitación física que provoca esta patología, el síndrome del túnel carpiano provoca un incómodo dolor que puede llegar a ser incapacitante.

A la hora de operar el túnel carpiano, existen dos técnicas quirúrgicas diferentes:

  • Cirugía endoscópica: a través de una pequeña cámara que se introduce en el túnel, el endoscopio, el cirujano podrá mirar en su interior y cortar el ligamento. La ventaja es que sólo es necesario realizar una o dos pequeñas incisiones en la muñeca del paciente y que resulta menos dolorosa que la cirugía abierta. En ocasiones se recurre a la ecografía en lugar de a la endoscopia para guiar la herramienta que corta el ligamento.
  • Cirugía abierta: el cirujano realizará una incisión en la palma de la mano, sobre el túnel carpiano y cortará el ligamento para conseguir aliviar la presión del nervio mediano.

El especialista será quien se encargue de analizar junto al paciente los riesgos y los beneficios de cada una de las técnicas y evaluar que procedimiento quirúrgico es el indicado para cada caso.

Riesgos de la cirugía:

Por lo general, se trata de una operación sencilla que no debe tener complicaciones. Muchos de los riesgos de la liberación del túnel carpiano son comunes a los de cualquier otra operación de la extremidad superior del cuerpo humano. Algunos de los riesgos a los que nos sometemos con este tipo de descompresión son:

  • Sangrado
  • Daño nervioso en nervio mediano y sus ramas
  • Liberación incompleta
  • Lesiones en los nervios, tendones flexores o vasos sanguíneos
  • Infección de las heridas
  • Fibrosis postquirúrgica
  • Cicatriz dolorosa

Postoperatorio cirugía liberación túnel carpiano

Una de las principales ventajas de esta operación es que devuelve la movilidad a la mano afectada en un plazo de tiempo muy corto, mejorando la calidad de vida de los afectados y poniendo fin a la incómoda situación de no disponer de las dos manos para poder realizar la mayoría de las tareas cotidianas. La mejoría de los síntomas tras la operación del túnel carpiano es casi inmediata, siempre que se haya logrado una descompresión total del nervio.

Aunque la recuperación postoperatoria varía, como en todos los casos, del paciente, se estima que en dos o tres semanas la persona intervenida pueda retomar su vida normal y durante la primera semana desaparecerán las molestias. En caso de inflamación, se recomienda mantener el brazo en alto durante varios días y si no baja, acudir de nuevo al médico.

Los puntos de sutura se retiran en un plazo de cuatro semanas, pero la cicatrización subcutánea se prolonga durante un par más. Es importante no retomar las actividades diarias de una forma precipitada para favorecer a una cicatrización buena y rápida. Se considera que el paciente estará del todo recuperado una vez transcurra un total de 6 meses. En ese momento, se estima que  puede haber recuperado toda o gran parte  de la sensibilidad y libertad de movimiento.

Los primeros días, los traumatólogos recomendarán al paciente reposo y el uso de una férula que inmovilice y estabilice la zona de la muñeca, pero no de los dedos. Pasada una semana, es aconsejable que el paciente comience una rehabilitación para acelerar el proceso de recuperación.

También se sigue un proceso de rehabilitación de la cicatriz, que suele quedar engrosada y muy adherida a los tendones flexores. Para recuperar esta zona son muy buenos los masajes, una vez retirados los puntos de sutura. Se comienza realizando movimientos circulares y se continúa con zigzag.

Después de la operación, el cirujano recomendará una serie de ejercicios que favorecerán la recuperación total del paciente en un tiempo mínimo. Estos se deben realizar siempre con cuidado, lentamente y en varias repeticiones.

  • Movilidad de los dedos
  • Rotación de los dedos
  • Apretar los dedos contra un objeto
  • Elevación de la muñeca
  • Aplicación de frío y calor

El tiempo de baja tras una operación de liberación del túnel carpiano depende de si la mano intervenida es la dominante o no y de la dependencia que tenga el paciente de esta. Por lo general, el proceso de recuperación no suele alargarse más de un mes y medio, aunque los resultados no se vean hasta pasado medio año.

Mejor cirujano del túnel carpiano

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