Se trata de una patología que se produce cuando los microorganismos invaden la columna vertebral. En el post de hoy hablamos de la infección vertebral: todo lo que debes saber, todo lo que debes saber acerca de esta patología. Consulta a un neurocirujano especialista en columna.
¿Qué es la infección vertebral?
Como hemos mencionado con anterioridad una infección vertebral se trata de una patología que se produce por la invasión de microorganismos en la columna vertebral.
Esta patología puede afectar a la calidad de vida de los pacientes, es de rigurosa importancia detectar a tiempo los síntomas para evitar que la infección evolucione y los tratamientos sean cada vez más complejos.
Cuando un microorganismo se instala en la columna vertebral, da lugar a una infección. Todo dependerá de la vía por la cual el microorganismo tuvo acceso, dependiendo de ello, la infección puede localizarse en una cavidad o un tejido.

Tipos de infección vertebral
Existen diversos tipos de infección vertebral, algunas de las causas de su diferenciación dependen del área al que afecte la infección.
- Si la infección afecta únicamente al disco vertebral se le conoce como discitis infecciosa. La provoca la bacteria E.coli , o el Stphylococo en frecuentes ocasiones.
- Si la infección es más extensa y afecta al disco intervertebral y a la vértebra, hablamos de espondilodiscitis.
- Si la infección alcanza las membranas del sistema nervioso que recubren la médula espinal puede desembocar en una meningitis.
- En algunos casos puede derivar en un tipo de artritis que se inicia en huesos y articulaciones de la propia columna, se nombre como espondiltis anquilosante.
Si la infección es un empiema, es decir, si la infección localizada se encuentra en un espacio o cavidad puede estar en el espacio epidural o subdural. Por otro lado, si hablamos de osteomielitis vertebral o espondilitis infecciosa, el absceso es una infección a través de un tejido.
La gran mayoría de los casos, 50% se producen a nivel torácico, seguido del lumbar, 35% y finalmente el cervical con un 15% de los casos.
Síntomas de la infección vertebral
La infección vertebral puede producirse por tres vías en las cuales los microorganismos llegan a la columna vertebral:
- Vía hematógena
- Inoculación directa
- Contigüidad de los tejidos
Uno de los principales síntomas es la aparición de dolor en la espalda, este tipo de afección suele empeorar en la noche cuando cambiamos de postura o cuando realizamos ciertas actividades del día a día.
Además del dolor localizado también se caracteriza por un dolor inespecífico o moderado.
Otro de los síntomas característicos puede ser malestar, cansancio generalizado y en algunos casos, aparición de fiebre.
Este tipo de dolor puede irradiar por el tórax o el abdomen. En el momento en el que afecta a espacios cervicales provoca disfagia e incluso, tortícolis.
En casos más extremos se inician alteraciones neurológicas. Déficit neurológico donde aparece a hipoestesia (disminución de la sensibilidad), adormecimiento o calambres en las extremidades afectadas.

Causas de la infección vertebral
Las infecciones vertebrales se deben a hongos, parásitos o bacterias que invaden ciertas regiones de la columna vertebral. La aparición de estos microorganismos se puede deber a múltiples causas entre ellas el antecedente de cirugía previa reciente.
En la mayoría de los casos se desconoce el origen del patógeno aunque, puede, entre otros, tener procedencia por vía hematógena, es decir, propagándose a través de la sangre.
En algunos casos, la infección se desencadena por la proximidad entre las estructuras cercanas a otras que se encuentran dañadas.
Cualquier persona puede sufrir este tipo de patología aunque hay factores que aumentan los riesgos de padecerla. Destacando así personas inmunodeprimidas, con enfermedades en los riñones, personas con traumatismo penetrante, alcoholismo, obesidad, desnutrición, etcétera.
Diagnóstico de la infección vertebral
Cuando el paciente acude a un especialista para tratar la infección vertebral, en primer lugar se realizarán los exámenes pertinentes de la zona, si se han producido cirugías con anterioridad, exploración de la herida. Y un análisis de sangre completo para conocer todos los valores.
Lo habitual en este tipo de casos es realizar pruebas de imagen para su diagnóstico que puedan permitir conocer el alcance que tiene la infección. Destacan las radiografías, TAC y especialmente la resonancia magnética.
Las resonancias nos informan acerca de los grados de implicación de las estructuras neuronales.

Tratamiento para la infección vertebral
Una vez determinando el diagnóstico del paciente, se lleva a cabo el tratamiento pertinente para acabar con esta dolencia.
Si es posible, los tratamientos iniciales deben ser conservadores especialmente en personas jóvenes, limitando los movimientos, rotaciones forzadas, impactos o vibraciones.
Por norma general, se aplica un tratamiento antibiótico durante varias semanas al que se puede asociar analgésicos y antiinflamatorios para aliviar el dolor del paciente.
Los casos que lo precisen pueden verse sometidos a una cirugía de columna vertebral para limpiar la infección.
Tratamiento de infección vertebral con el Doctor Somoza experto en cirugía de columna
Tras conocer las causas y tratamientos, es indispensable acudir a un profesional si se sufre algún tipo de molestia o síntomas relacionados con lo expuesto con anterioridad.
El objetivo es mitigar el dolor del paciente y ponerle fin lo antes posible.
Si precisas más información sobre la infección vertebral no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Así podrás conocer la visión de un médico profesional de las patologías de columna.